Hace días que no estoy en el blog, lo de Japón el mismo día que el recuerdo de Madrid, me dejó bloqueada totalmente. Mis oídos que suelen hacer de antenas, sólo oían voces silenciosas, mis ojos que buscan otras miradas, veían espectros caminando por la vida, mis piernas que buscan senderos, sólo encontraban piedras en el camino, mis manos en otros momentos firmes y sabedoras de su oficio ante un teclado, se mostraban temblorosas igual que la tierra, y mi cerebro igual que siempre dando vueltas, pero esta vez sin rumbo y perdido.
¿Qué pasa? ¿qué nos pasa? ¿que estamos ocasionando? ¿el caos? o acaso nosotros mismos somos el caos.
La Madre Naturaleza, se queja. Ha sido paciente, condescendiente, todos lo sabemos y sabíamos que esto podía empezar a ocurrir. Dá igual, sobramos mucha gente, el que tiene el poder, tiene la información y viceversa, a los de a pié, no nos queda más remedio que ir dando bandazos y ser títeres y marionetas en manos de unos ¿puede decirse desaprensivos? que solo piensan en ellos mismos y en mantenerse a cualquier precio en su posición.
En los tiempos de crisis, los ricos son más ricos y los pobres más pobres, los ladrones son más de guante blanco y los pobres son rateros (hasta en eso hay diferencias). No me creo ni harta de vino, que la pobreza y la miseria que vive tanta gente en algunos países, África, Sudamérica y regiones y barrios de nuestra España, no se pueden aliviar con las inmensas fortunas que pueblan el planeta Tierra.
Cuando Gadafi subió al poder, yo era una cría, pero recuerdo perfectamente que decían "¿como gobierna un terrorista un país?", como es posible, que en aquellos momentos y las siguientes décadas, nadie, ha dicho nada en contra, y ahora de repente, hay que organizarla.
Sencillamente, o nos aburrimos y no tenemos otra cosa mejor que hacer, o bien estamos en crisis, hay que hacer guerras para sacar armamento que es lo que mueve el dinero, y así "a río revuelto ganancia de pescadores" obtenemos muchas ventajas, por un lado la gente de la calle no pensará lo mal que lo hemos y estamos haciendo, pensarán en cosas de fuera y no en lo que se agobia su vecino porque pierde la casa por no poder pagar la hipoteca, porque a su vez se ha quedado sin empleo,...
¡¡¡Ya está bien!!! la diosa Fortuna, se alía con ellos y ¡haaalaaa! un terremoto y un tsunami, por si fueramos pocos los problemas que estamos por aquí.
Parece ser, -según fuentes ocultas de la Tierra- que como los humanos somos muy gallitos para unas cosas, pero a la hora de la verdad, tiramos la piedra y escondemos la mano, pues la Madre Tierra, nos lo pone fácil, "me muevo por aquí, os mojo por allá y ventilaros vuestros problemas con las nucleares, como podais, que para eso son vuestras".
"Chapeau" por el pueblo japonés, por su educación y por el civismo que demuestran, ya quisieramos muchos....
A todas las injusticias, estas y muchas otras que se quedan en el tintero ¿cuando diremos ¡¡¡basta ya!!!?, no preocuparse que la Tierra se encarga de ello.
Irene
Muy inspirador. Totalmente de acuerdo contigo.
ResponderEliminarSaludos.